Entender el abrazo de Dios nos permite caminar hacia una encarnación total de la fe. Nos permite vivir el abrazo de Dios 


Quiero poder cerrarte en un paréntesis de brazos.

entrelazando los mios con los tuyos.

Quiero crear contigo un circulo sin afueras.

incluir en el movimiento al mundo entero y prestarte mi cuerpo para este abrazo eterno.


Invitame a entrar en ese abrazo

y. aprendiz en esta escuela.

dejando la indiferencia vivire de rodillas y abrazado dejando las diferencias

viviré de rodillas y abrazando


Quiero apretarte en el vientre de tu madre aún no nacido,

siendo hombre ensangrentado y crucificado.

Quiero apretarte en la blanca Hostia y en la vida que me has dado,

en el sufriente y en quien tengo al lado, siendo siempre tú el prójimo y necesitado.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La escuela del alma

El maestro Juan Martínez que estaba allí

Trabajo ordinario, gracia extraordinaria