Lo que el mundo necesita

 



Monseñor Fisichella, uno de los más cercanos colaboradores de Benedicto XVI, nos ofrece en esta obra un original resumen de su pensamiento. Su título, Lo que el mundo necesita, es una expresión que aparece varias veces en los escritos de Joseph Ratzinger. Con ella se refiere a los puntos cruciales de su pensamiento teológico y pastoral: la centralidad de Jesucristo; la racionalidad de la fe; la circularidad entre la fe, la esperanza y el amor; el diálogo permanente entre razón y fe; el gran desafío de la evangelización que los cristianos están llamados a realizar con un estilo de vida coherente con Evangelio.

El libro dedica los primeros capítulos a comentar algunos escritos del Papa, como “Jesús de Nazaret”, “Deus caritas est” o “Spe salvi”, para seguir -la segunda mitad del libro- desarrollando temas relacionados con la fe y muy valorados por el papa alemán: “la fe nace del amor”, “por qué creer”, “la fe transmitida”, etc.

La cuestión sobre Dios no es un problema teórico que no aporta ningún cambio en la vida de una persona; es todo lo contrario. Que exista o no exista Dios, cambia la vida e introduce una visión diferente del hombre v del mundo. La crisis de fe en nuestros días trae consigo también una visión particular de la sociedad y de las reglas que deberían guiarla.


El autor no puede omitir una referencia al laicismo. “Algunos sostienen, por ejemplo, que la legislación de un país democrático debería regularse de manera laica, es decir, sin ninguna referencia a Dios, para no chocar con la sensibilidad de quienes no creen. Es fácil mostrar lo reductiva que es esta visión de la laicidad: la formación de las leyes no puede estar guiada por esa supuesta neutralidad, pues en cada caso serían sancionadas solo por la mayoría del momento”. El criterio de la mayoría, por sí solo, es demasiado poco para pensar que el legislador haga una ley justa tendente al bien común. 



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